Este puede ser un sábado para disfrutar de las actividades cotidianas en el que te podrás adelantar a los imprevistos, las situaciones molestas con amistades, los cambios bruscos y la rebelión interior para evitarlos. Estar pendiente de lo que sucede a tu alrededor te puede salvar de accidentes o de hacer las cosas al revés. También podrás darte cuenta cuando el sentimentalismo esté a punto de desbordarse y tomar el control.
Un día en positivo. La sensibilidad y la razón andan de la mano, por lo que tendrás la capacidad de examinar las situaciones antes de reaccionar y podrás ser práctico en tus tristezas. Será beneficioso aplicar esta habilidad al momento de hablar, porque corres el riesgo de hacerlo de mas.
Podrás disfrutar de la Pole si te gusta la F1, aunque no parece ser la velocidad la que destaque en positivo, mas bien todo lo contrario.
Se podrán salvar dificultades y crecer en el proceso.
Es un día nueve, 1+3+1+1+2+0+1+0, el número del hombre porque su gestación dura 9 meses. Se asocia con Sagitario, el signo zodiacal del centauro, animal mítico mitad hombre mitad caballo que nos recuerda las dos formas de actuar, desde nuestra naturaleza animal o desde el alma. Buen motivo de reflexión.
Otra característica de este sábado es que corresponde a Luna creciente, según la creencia popular propicia para cortarse el cabello si quieres que te crezca rápidamente, por lo tanto no adecuada para depilaciones. Es una fase apropiada para aumentar la productividad y acelerar las actividades diarias. En este caso especialmente favorable para limpiar la casa, dejar viejos hábitos, cambiar de punto de vista, liberarte de acuerdos personales que hayan perdido vigencia y realizar cosas originales.
Si quieres lograr algo que no has logrado, haz algo que no hayas hecho. También para plantar flores
>))

En el año 354 en Tagaste, Argelia nace Aurelius Augustinus, también conocido como San Agustín, uno de los padres de la Iglesia latina y famoso por sus reflexiones acerca de Dios y su obra. Hay un relato medieval al respecto de sus estudios sobre el misterio de Dios.
Un día San Agustín paseaba por la orilla del mar, dando vueltas en su cabeza a muchas de las doctrinas sobre la realidad de Dios, una de ellas la doctrina de la Trinidad. De repente, alza la vista y ve a un hermoso niño, que está jugando en la arena, a la orilla del mar. Le observa más de cerca y ve que el niño corre hacia el mar, llena el cubo de agua del mar, y vuelve donde estaba antes y vacía el agua en un hoyo. Así el niño lo hace una y otra vez. Hasta que ya San Agustín, sumido en gran curiosidad se acerca al niño y le pregunta: "Oye, niño, ¿qué haces?" Y el niño le responde: "Estoy sacando toda el agua del mar y la voy a poner en este hoyo". Y San Agustín dice: "Pero, eso es imposible". Y el niño responde: "Más imposible es tratar de hacer lo que tú estas haciendo: Tratar de comprender en tu mente pequeña el misterio de Dios".

Namaste
susana colucci
Relato sobre la forma de pensar de San Agustín tomado de Wikipedia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario